miércoles, 30 de mayo de 2018

Rosa Regàs

La musa del Gauche Divine   
Rosa Regàs en la Biblioteca SGA 
en noviembre de 2015


      Tiene 84 años. Antes de ser escritora y ganar premios, fue una niña en el exilio francés. Se casó joven y tuvo hijos enseguida. Quería una familia grande y unida como la que no había podido tener. Frecuentaba Bocaccio, la discoteca de la calle Muntaner, donde se gestó la plataforma lúdica y cultural que la Barcelona más abierta utilizaba para proyectarse al resto de España, un movimiento que Joan de Sagarra llamó la Gauche Divine.
   Regàs considera que la Gauche Divine habría pasado a la historia como un grupo de una gran profundidad literaria como lo fue Bloomsbury, pero que le faltó la resonancia londinense.
  Su empeño ahora es publicar un libro en donde se sepa la verdadera historia del movimiento cultural más importante del tardofranquismo pero el libro no tiene fecha.
  A su edad considera que tiene derecho a hacer lo que quiera cuando quiera en Llofriu, el pueblo donde vive desde hace muchos años, donde mañana se pondrá a escribir, o no.

   
Con Salvador Dalí
   Rosa Regàs Pagés (Barcelona, 1933) trabajó como editora y como traductora para las Naciones Unidas. Fundadora de la editorial La Gaya Ciencia en 1976 y  de las revistas Arquitectura Vis y Cuadernos de la Gaya Ciencia. Es conocida tanto por su carrera literaria, como autora y editora, así como por su dirección de la Biblioteca Nacional.

   Licenciada en Filosofía y Letras por la Universidad de Barcelona, en 1964 comenzó a trabajar en la editorial Seix Barral hasta 1970, año en el que funda las editoriales La Gaya Ciencia, que publicó a autores entonces poco conocidos como María Zambrano, Álvaro Pompo, Javier Marías y Manuel Vázquez Montalbán, y Ediciones Bausán, de literatura infantil. 

   De 1983 a 1994 trabajó como traductora para las Naciones Unidas en ciudades como Ginebra, Nueva York, Washington, Nairobi y París. 
   En 1987 el escritor Carlos Trías que dirigía una colección de Ciudades de Ediciones Destino, le propuso que escribiera un libro basado en Ginebra, lugar donde residía debido a sus ocupaciones como traductora. Ginebra, se convierte en su primer libro.
   En 1991 vio la luz la que sería su primera novela, Memoria de Almator, basada en el doloroso avanzar de una mujer hacia la edad adulta. En 1994 es nombrada directora del Ateneo Americano de la Casa de América de Madrid y es en ese mismo año cuando Rosa Regàs gana el Premio Nadal por su novela Azul. Pero el espaldarazo definitivo a su popularidad lo recibió en 2001 al hacerse con el Premio Planeta, que le fue concedido por La canción de Dorotea.

   En 2004 es nombrada Directora General de la Biblioteca Nacional, puesto que ocupa hasta 2007, al dimitir por desavenencias con el ministro de cultura de entonces, César Antonio Molina.
   


   Regàs es una colaboradora habitual de diarios, revistas, radio y televisión, medio en el que se realizó la adaptación de una de sus obras, Diario de una abuela de verano. Ha publicado, además, en antologías de varios autores como Cuentos de Cine, El peor viaje de nuestras vidas, Mujeres al alba, Retrato de un siglo, entre muchos otros. También ha sido la coordinadora del libro de relatos de autores barceloneses, Barcelona, un día, y de autores madrileños, De Madrid al cielo.
   
Rosa Regàs con sus nietos, sus niños de verano.
   Ha formado parte de los Jurados del Premio Príncipe de Asturias de las Artes y las Letras, Premio Internacional Alfaguara de Novela, y Premio Ortega y Gasset de Periodismo. Desde finales de 2008 forma parte del jurado del I Premio BUBOK de creación literaria junto al escritor Lorenzo Silva. 

   El papel de Regàs en el mundo de la cultura se ha visto recompensado con premios como la Orden de Chevalier o la Cruz de San Jordi. Unos de sus últimos premios fue 2013 recibiendo el Biblioteca Breve por Música de cámara.
   Actualmente promociona Miradas de ficción, un libro colectivo en el que participa con un relato ambientado en el mundo del cine.

No hay comentarios:

Publicar un comentario